No sé qué tiene Zapatero que a pesar de que ha cometido errores, siempre termina por convencerme de que me olvide de mis reticencias hacia la alta política.
Hoy nos dice que España saldrá de la crisis, y siento que es hora de arrimar el hombro e intentar conseguir que, no sólo España, sino el mundo, salgan de esta crisis.
Pero que no se equivoque nadie. Lo haremos, pero exigiremos a cambio que se implanten valores solidarios, sostenibles y humanos en nuestras instituciones tanto públicas como privadas.
Se terminó la barra libre de los sinescrúpulos.
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