sábado, 25 de septiembre de 2010

La ciencia en Occidente es dejada de lado

El capitalismo ha cavado su propia tumba, y nuestros líderes la han certificado con sus políticas preestablecidas para enfrentarse a la crisis.

La Crisis, ese gran enemigo de Occidente derivado de otro mucho mayor, y menos visible, que es es la autocomplacencia mezclada con la avaricia de nuestro sistema liberal.

Durante décadas nos han preparado para ser los ciudadanos perfectos para el capitalismo, consumir mucho, especializarnos en nuestras tareas productivas, consumir más, seguir especializándonos.

Hemos creado un sistema que alienta ciudadanos sin capacidades fuera de sus ámbitos, de sus reducidos ámbitos, y desalentado todo lo que no sea producción en masa, educación en masa, pensamiento en masa.

Los capitalistas dicen que somos distintos al comunismo, hombres libres, autónomos, individuales…,mentira, la gran masa somos meros ciudadanos consumidores. Es así como nos querían y es así como nos han producido.

Consumir más, más rápido, más compulsivamente.

Y así llegamos a la crisis, endeudándonos como locos, dejadme repetirlo, como LOCOS, y el sistema se está viniendo abajo, porque los diseñadores de este sistema no tienen otras ideas para sustituirlo. Sólo intentar revivirlo, reanimarlo, o al menos, prolongar su agonía el máximo tiempo posible.

Los pensadores de este sistema han sido instruidos para elaborar teorías que debían mantener la tapadera de que todos somos hombres libres. Mientras los verdaderos beneficiados del sistema que han diseñado a su gusto ganan más y más cada día (no hay más que ver el estudio que la revista Forbes realiza cada pocos meses sobre los hombres más ricos).

Y mientras sus fortuna crecen, creemos ser libres.

¿Pero sabéis lo peor?

Que hasta ellos son hombres muertos, económicamente hablando. Pronto sus fortunas les serán arrebatadas.

Donde ahora vemos sólo la amenaza asiática de la deslocalización, que manda a tantos hombres y mujeres al paro, en breve empezaremos a ver cómo sus empresas empiezan a amenazar muy seriamente a las empresas y fortunas occidentales.

Pensadlo bien, ante esta crisis, las empresas de occidente, y sus gobiernos, han afrontado la crisis como ellos saben, recortando sus presupuestos de I+D+i, de educación, de formación…justo lo contrario de lo que deberían hacer.

España no es una excepción. Nuestro Gobierno, acosado por mercados, sindicatos y datos económicos, va a reducir nuestra única esperanza para que en el futuro no se repita una crisis como esta. Nos está dejando en una posición de indefensión de cara a futuras crisis.

Porque lo que se van a necesitar en el futuro son ingenieros, médicos, investigadores, físicos, astronautas, matemáticos, programadores, y sin embargo, nuestras empresas, con ayuda de esos mismos líderes del liberalismo, con ayuda de los pensadores que han defendido estas políticas, lo que van a tener esas empresas es un ejército de parados sin cualificación técnica, sin capacidad ni ganas ni motivación, y seremos incapaces de hacer frente al ascenso de las empresas y gobiernos como China, India, Brasil, Corea.

Estas naciones, sus empresas, no sólo cuentan con recursos humanos infinitamente superiores en número, sino que ya están mucho más preparadops que nosotros, y mucho más motivados.

Nuestra única ventaja, nuestra tecnología y nuestros sistemas de organización se vendrán rápidamente abajo si no revertimos rápidamente esta penosa situación de ciudadanos indefensos y desinformados.

Si no conseguimos ilusionar a los ciudadanos occidentales en los próximos cinco años, si no conseguimos cambiar en menos de tres el sistema educativo, y adecuarlo para que formen a personas capaces para lo que en la próxima década España y Europa necesitarán para revivir sus sistemas de diseño y servicios.

No hay comentarios: