sábado, 24 de septiembre de 2011

El potencial de España


Que España está pasando por uno de sus peores momentos de su historia democrática es evidente. Que el mundo tampoco está en todo su esplendor también.

Sin embargo, quienes conocemos bien este país porque hemos vivido en él unos cuantos años ya, y lo hemos estudiado en todas sus vertientes, sabemos que esta situación es transitoria y que pronto España volverá a levantar cabeza.

Hay muchos empresarios aprovechados, y muchos políticos corruptos o inútiles, y muchos sindicalistas vagos, y funcionarios improductivos, y trabajadores egoístas, y periodistas parciales y vendidos, sin embargo, no debemos olvidar que aunque sean los que copan las noticias en los diarios son sólo una pequeña minoría.

El potencial de España está sin aprovechar, por cuanto sus recurso natural más valioso, que es su potencial medioambiental, y su recursos humanos más impresionantes, su creatividad y capacidad de sacrificio, apenas han comenzado a despuntar en esta crisis.

La potencia de España en cuanto a turismo sosteniblegastronomíapotencia energética renovable, situación estratégica, capacidad de invención, creatividad para el ocio y tantos etcéteras que no lograría enumerarlos todos, son incuestionables, y permanecen apenas sin explotar.

La crisis ha dejado tocadas a las empresas españolas, sus bancos, sus multinacionales, sus pymes y a sus trabajadores, y las ha puesto en una situación vulnerable.

En esta situación de fragilidad, son presa fácil para los llamados fondos buitre, los inversores oportunistas o las multinacionales de todo tipo.

Seamos claros. Ya somos un mercado secundario para muchos países, y nuestro acceso a otros mercados nos convierte en un blanco predilecto para acceder
 al Norte de África, a Latino América, o a Europa.
Y somos, además, un blanco fácil ahora mismo.
Por ello el gobierno, y no sólo el estatal, sino los de las comunidades autónomas, ayuntamientos y demás administraciones, deberían plantearse muy seriamente una estrategia que estudie las futuras compras que se van a producir con el fin de garantizar que la riqueza generada, que en breve será mucha, revierta en buena parte en España.

El ejemplo de Zara online es un caso paradigmático, pero podría ser sólo la punta del Iceberg que nos acosa, y que promete restar riqueza a espuertas cuando comience la recuperación a nuestras empresas y a ciudadanos.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Coleccionismo e impresoras 3D


El otro día os esbozaba la idea de que las impresoras 3D iban a revolucionar el mundo si se combinaban con tecnologías tan potentes como la nanotecnología y las redes de alta velocidad (de verdad).
Hoy quiero comentaros una idea que muchos han soñado, el uso de las impresoras 3D para recibir los coleccionables que hoy acudimos semanalmente a comprarlo en los kioscos.
Y es que la idea de suscribirse por internet a una colección, fijar una forma de pago y de recepción de la mercancía, es muy potente. ¿Os imagináis recibir cada semana un archivo, cada viernes por la tarde, por ejemplo, la última entrega del coleccionable de libros de Lovecraft, o de coches de los años 60, o la que sea, y que inmediatamente la impresora los convierta en el de deseo?
O las piezas del acorazado Bismarck, o las de una casa de muñecas neocolonial, etc.
Un mundo de posibilidades. Nos espera un futuro muy interesante, ¿Verdad?

domingo, 11 de septiembre de 2011

Fracaso personal

No puedo calificarlo de otra forma.


De niño hice la promesa de que daría mi vida a la protección de la Naturaleza, que salvaría a los seres vivos acosados por la amenaza humana.


Prometí que en la hora de mi muerte estaría en plena naturaleza luchando por ellos.


Sin embargo, con una edad considerable transcurrida y con una más considerable todavía serie de responsabilidades ya a mis espaldas, puedo decir que hasta el momento he fracasado.


Lo que he hecho apenas puede llamarse de lucha ambiental, y mis logros son bastante exiguos.

La vida, los estudios, la familia, el trabajo, me han ido alejando de aquellos sueños de niño, perdidos en bosques y montañas, navegando por encima de las aguas perladas de los océanos, o explorando sus insondables profundidades en busca de unos de esas millones de especies todavía sin descubrir.

Queda tiempo, todavía puedo lograr entregar mi vida al bien común más puro, que no es otro que cuidar a la gente a través de la lucha por salvaguardar el aire que respiran, el agua que beben, la comida que comen o conservar los bosques y animales que curan nuestro espíritu y sanan nuestras almas.


Todavía queda tiempo, pero cada día, me queda un día menos para demostrar que mi palabra dada, no fue en vano, y que, por fin, puedo ser útil a este planeta que nos trajo a todos nosotros a la vida.

sábado, 10 de septiembre de 2011

Queda mucho por hacer

Viendo los problemas del mundo pienso que todavía nos queda mucho por hacer para que todo el mundo pueda viviesen paz y en libertad, con salud y sin carencias.